lunes, 20 de agosto de 2012

El que quiera entender, que entienda.

Hoy es el fin.


El fin de promocionar mis ideales por las redes sociales.


E incluso el fin de hablar de mis ideales con aquellos con quienes piense que no merece la pena.



Yo siempre he sido así.



He andado defiendo mis ideales, metiéndome dónde no me llamaban para dar mi opinión porque creía que podría ser importante, que podría ser importante una convergencia de distintas opiniones.


Siempre he apoyado a quien creí que debía. 



Nunca me he callado, jamás. Por muchos problemas o desprecios que ello me haya traído. Jamás he escondido quién soy. De hecho siempre lo he gritado. 



Era mi forma de aportar algo de variedad a este mundo, supongo.




Pero hoy, a las 15:40 comienzo a escribir una declaración de intenciones en la que queda plasmada una promesa con un único fin: ser una más.




Y así será.



El que quiera entender, que entienda.


Una vez más, recapacito. Y creo que es lo más conveniente.



La pluma, no hace al escritor

sábado, 18 de agosto de 2012

Autodestrucción

No soy,

No he sido,

Y nunca seré.



El cansancio me puede, y las secuelas son demasiado hondas siempre, y no puedo calmar el dolor.

Ni siquiera con ayuda.


Me ahogo, y esta vez, no deseo ninguna salvación.

viernes, 3 de agosto de 2012

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El amor jamás reclama; da siempre. 

El amor tolera, jamás se irrita, nunca se venga.

                                                                                        Indira Gandhi


A veces, y sólo a veces, no sé qué es el amor.



No lo sé, porque yo amo, y reclamo.

Porque yo amo, y no doy siempre.

Porque yo amo, y no lo tolero todo.

Porque yo amo, y sí, me irrito, y no pocas veces.

Porque yo amo, y, aunque no me vengo, no olvido.




Pero supongo que es en ese instante, al pensar todo lo que hago, aún amando,  cuando vislumbro la verdad.

Yo no soy el amor. El amor es lo que nos une.


Porque mi amor por ti no reclama, se irrita, recuerda o venga. Porque mi amor por ti tolera todo y te da mi ser por completo.


Y es que el amor no es lo físico, no son los actos.


El amor es lo etéreo, las conversaciones de nuestras dos almas, donde se reconocen la una a la otra como partes de una misma en otra vida.

El amor es sentir tu ausencia o presencia incorpórea. Es sentir la sonrisa de tu interior que no es mostrada, o esas lágrimas jamás reflejadas.


El amor es la voluntad que me hace querer ser mejor e intentar hacerte feliz.


El amor, eres tú.



Y hoy, hecho de menos a mi amor. Hecho de menos lo físico, y lo demás.


Hoy, y desde hace algún tiempo, nos llevamos echando de menos.


Yo, como siempre, te esperaré con un largo vestido en nuestro banco, cerca de la fuente. Sentada al lado de la rosa que un día cortaste por mi.




http://www.youtube.com/watch?v=vhtgLa3Ql4U

 

 



Momentos eternos

Momentos.

Al fin y al cabo de eso se compone la vida, de los momentos que creamos.


Procuras que tus momentos sean con las personas a las que quieres, haciendo lo que te gusta...


Hundiendo la mano en la harina, quizá. O estrujando un tomate antes de hacerlo en conserva.

Puede que tu momento sea mirando a los ojos de tu perro, que te pide ansioso caricias.


O simplemente sea salir al campo y sentarte a oler la tierra, la hierba y la vida que se crea y destruye a tu alrededor.


Un magnifico momento, que sólo nosotros somos capaces de hacer realidad, es aquel que aparece de noche, justo antes de dormir, cuando te miras profundamente a los ojos reflejados en un espejo, y te preguntas si has hecho lo mejor posible ese día por todas las personas que te rodean. Cuando la respuesta es un


No seguiré escribiendo cosas sin sentido, prefiero dejarlo aquí. 

Detener este momento. Y respirar.




Haz que todos tus momentos, sean maravillosos.